Soneto dedicado al insuperable
Luís Almirante Brown: un poeta... de la puta que lo parió
El bravo jefe su rugir blandía
y ensortijando desatadas fauces
deslumbraba con más sabiduría:
los mandaba a las conchas de sus madres.
Apareció la barra embravecida
como chinos pegando la patada,
y dando vuelta al mundo, que se queda
con el culo apuntando hacia la nada.
“Hay que tener pelotas y cerebro
ir al frente, por Boca y Argentina
hay que hacer el aguante, no sean putos”;
el salmo fluye en dulce melodía.
“La vida es un negocio” agrega el barra,
se le ve la certeza en la sonrisa.
y ensortijando desatadas fauces
deslumbraba con más sabiduría:
los mandaba a las conchas de sus madres.
Apareció la barra embravecida
como chinos pegando la patada,
y dando vuelta al mundo, que se queda
con el culo apuntando hacia la nada.
“Hay que tener pelotas y cerebro
ir al frente, por Boca y Argentina
hay que hacer el aguante, no sean putos”;
el salmo fluye en dulce melodía.
“La vida es un negocio” agrega el barra,
se le ve la certeza en la sonrisa.
4 comments:
Lo importante, al decir del Almirante, es lograr ese tránsito fulgurante que se logra al ir desde lo excelso a lo popular.
Con eso, te llenas un River.
Bonita pieza sancho, aguante la poesía sanchesca.
Admiro al almirante Brown desde que recién leí sus hazañas en el museo naval de El Tigre. Mientras leía sus aventuras, veía los cuadros de sus barcos y batallas.
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
Igual son dos almirantes diferentes eh. Uno es Guillermo Brown y otro es Luis Almirante Brown.
joder que lío
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