Era una mina bien, era un gran coche
era un Packard placero, era una alhaja
auto que siempre laboró de noche
llevando siempre la bandera baja.
Pero un día la droga la hizo suya
y en vez de cargar nafta, hechó morfina
y cerrando el escape por la bulla
se fajaba de bute en cada esquina
Ayer la vi pasar, iba dopada
y me sentí, yo curda, un santo Asís
al ver que de su pinta abacanada
pinta que fuera de auto de parada
solo queda cual resto de chocada
con los cuatro fierritos del chasís.
Monday, November 19, 2007
Packard
Publicado por
Gilgalad
en
9:23 AM
Etiquetas: Carlos de la Púa
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3 comments:
Bien gilga. Se puede escuchar la tristeza infinita de Rivero en cada una de estas palabras.
Impresionante. La voz más grave del planeta.
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