Friday, April 11, 2008

CERVEZA Y PICADA EN AVENIDA DE MAYO Y SALTA

el Iberia es un tipo de bar que nunca me cayo bien, por lo menos en su version actual, de un estilo aggiornatto finisecular, grande, muy vidriado, iluminado con luz fria, sin embargo con una fauna autoctona variopinta, producto de la cercania con el microcentro y con Santelmo y al mismo tiempo con el Teatro Avenida, que le regala su concurrencia de habitues a la opera, el lugarcito tiene su encanto, a ciertas horas.
Lo empece a frecuentar en la epoca del comienzo de la Ley Sin Humo, porque tiene un saloncito en la planta alta para fumadores, y como las veredas de la Avenida de Mayo son anchas, unas mesitas muy agradables para estar al anochecer y clavarse unas cervezas con picadita.
He dejado de fumar pero me quede con la costumbre de las mesitas en la calle y la cerveza.
Anoche volvi despues de algun tiempo, por ser una de las ultimas noches amables del otoño, cerca de las 23, las mesas de la vereda estaban ocupadas y me instale adentro.
Al entrar note la novedad: el Iberia despues de las 10 de la noche ahora es un bar de putas
Muchas putas, como nueve o diez putas gordas y enormemente tetonas de edades indefinidas y labios gruesos y zapatones con plataformas gigantescas y polleritas apretadisimas y efimeras.
Lo que realmente lo hace algo llamativo en realidad no son las putas que no difieren en nada de otras putas de la zona sino que coexisten con el anterior elenco de turistas europeos, tipos que hacen negocios por celular e interrumpen para hablar de futbol con los mozos de moñito, gente que trabaja con laptops wifi, y viejas que comen sanguches de miga tostados a la salida de la opera. En fin...

3 comments:

La Fiera said...

Buen lugar para un encuentro de pescadores. Sobre todo si quedan mozos con moñito, especie más en extinción que la Ballena Franca Austral.

Nachete said...

Curioso, es una vuelta al siglo XIX que me parece delicioso, donde en los locales había todo tipo de consumo sin producir extrañeza.

El guardian de la maldita ota said...

y hay que destacar además, que en sus buenos tiempos, en los de la guerra civil, el Iberia era el reducto de los rapublicanos escapados, que no escatimaban nunguna oportunidad de cagarse a tortazos con los putos falangistas que paraban en el bar Plaza Asturias o el otro que esta en diagonal que no recuerdo como se llama. Tremendas trifulcas se armaban.