Friday, February 29, 2008

Chorizos Puma-Rola con Porotos y 37° afuera...


y un Ratatouille...

Thursday, February 28, 2008

EL MUCHACHO DE LOS BARES


Recostado en el pasto tarareaba una canción de cuna que quiso hacer sonar en los bares del Village, pero no lo dejaron. Le dijeron que cantaba bien, pero tenían alguien que lo hacía mejor, y lo mandaron atrás de la barra. Y el Rompevidrios, después de escucharlo, pensó que el Muchacho no estaba mal, tenía su linda voz, pero le faltaban todavía unos cuantos grandes premios para ser cantante. Aún así lo acompañó alguna que otra vez en el piano, y tomaron copas juntos. El Muchacho se defendía como un cosaco. Tomaba envión y acompañaba la subida del vaso con una inclinación hacia atrás de la cabeza, corriendo no pocas veces el peligro de dar la nuca contra el piso, tan solo por un chupito de Vodka. Le faltaban todavía unos cuantos grandes premios pero aún así se hicieron amigos.

El Muchacho llegó a Manhattan desde Little Rock, condado de Pulsaki, a orillas del río Arkansas. Llegó con una recomendación especial escrita por la escuela de música de su pueblo, que sólo sirvió para hacer colapsar de risa a los managers de los bares de la Isla. Allí para sobrevivir sólo servía la suerte, el talento, y en ocasiones, la persistencia. Las cartas sólo causaban lástima. El muchacho lo entendió después del quinto bar donde su nariz chocó contra una puerta. No estuvo mal como aprendizaje. A partir de ahí fatigó algunas estaciones de subte, Union Square, Astor Place, aunque prefería la tranquilidad del cemento de Tompkins Square, donde se podía conseguir cualquier sustancia sin demasiados riesgos.

El Rompevidrios recordó al muchacho en medio de esa ruta de polvo y viento, porque le encontraba alguna similitud con el tipo que decía ser Bob. Los dos se habían enamorado perdidamente de la Sopapa, aunque en eso no tenían el privilegio de la originalidad. La Sopapa era especialista en enamorar perdedores con la guardia baja. Los conquistaba a puro jab y gancho al hígado, y cuando estaban en la lona, besándole los pies, dejaba el cuadrilátero displicente, con aire sobrador, y salía a la calle a buscar otro rival de peso con quien entretenerse. No, no era eso lo que los unía. Los hermanaba la rutina del asesinato. Los dos terminaron entre sangre y cornadas, con los huesos tras las rejas. El muchacho, después de que la Sopapa partió de la Isla, cayó enfermo por una robusta mexicana que resultó ganarse la vida como prostituta. Cuando se enteró, después de haberse tatuado su nombre en el pecho, el Muchacho no lo toleró y los celos le desfiguraron el discernimiento, como les sucede a los novatos y a los engreídos. Le alcanzó con un tiro bien direccionado al centro del corazón. La chica no pudo resistirlo, y el Muchacho tampoco. Fue a entregarse solo, arrojando la toalla antes de que alguien lo denunciara. No tenía valor para ser prófugo, después de todo le faltaban unos cuantos grandes premios.

El recuerdo lejano de aquel compañero de bares lo hizo detenerse a pensar por primera vez en el tipo que decía ser Bob. Es curioso que no haya sentido odio por ese asesino ni aún después de conocer los detalles más siniestros de la masacre. Cualquier persona con sangre en las venas hubiese sido víctima del deseo incontenible de partirle el cráneo. Pero Johnnie no era cualquier persona.

Wednesday, February 27, 2008

Christmas Card from a Hooker in Mineapolis



hey charlie i'm pregnant
and living on the 9th street
right above a dirty bookstore
off euclid avenue
and i stopped takin dope
and i quit drinkin whiskey
and my old man plays the trombone
and works out at the track

and he says that he loves me
even though its not his baby
and he says that he'll raise him up
like he would his own son
and he gave me a ring
that was worn by his mother
and he takes me out dancin
every saturday night.

and hey charlie i think about you
everytime i pass a fillin station
om account of all the grease
you used to wear in your hair
and i still have that record
of little anthony & the imperials
but someone stole my record player
now how do you like that?

hey charlie i almost went crazy
after mario got busted
so i went back to omaha to
live with my folks
but everyone i used to know
was either dead or in prison
so i came back to minneapolis
this time i think i'm gonna stay.

hey charlie i think i'm happy
for the first time since my accident
and i wish i had all the money
that we used to spend on dope
i'd buy me a used car lot
and i wouldn't sell any of em
i'd just drive a different car
every day, dependin on how
i feel

hey charlie for chrissakes
do you want to know the
truth of it?
i don't have a husband
he don't play the trombone
and i need to borrow money
to pay this lawyer
and charlie, hey
i'll be eligible for parole
come valentines day

Monday, February 25, 2008

ESTOFADO MANCHEGO


La escopeta volvió de la noche con una liebre y media docena de perdices ya peladas. Las tiró a los pies de Johnnie, y fue a lavarse las manos en un charco. El rompevidrios pudo adivinar el final precipitado de aquellos animales en las pupilas de los ojos todavía abiertos. Nunca le había producido dolor o tristeza ver un animal muerto, ni siquiera se lo cuestionaba. Sin embargo las pupilas verdosas lo hicieron cavilar. Fue semilla quien lo sacó del ostracismo sentimental, y lo trajo de nuevo a la tierra de los vivos.

- ¿Te las vas a quedar mirando o las vamos a comer? – pregunto risueño - Mi abuela las hacía estofadas a la Manchega, nunca fallan. Verduras tengo en el camión.

- En este tiempo, me acostumbre a no comer. Podría sobrevivir cuarenta días en el desierto tomando mate y comiendo raíces. El estómago no se lleva bien con el dolor.

Semilla, que había intuido todo desde que lo vio caminar solo en una ruta desolada, le sonrió.

- Puede faltar todo en la vida, mi amigo, pero no puede faltar un plato de comida. Y estoy hablando del plato en sí mismo, del ritual de detenerse a un costado del camino y prepararse para lo mejor que nos puede dar el día. Sólo hay tres cosas que valen la pena: Una linda mujer, un plato de comida y un poco de vino, para poder digerir las dos anteriores.

Johnnie lo miró como quien escucha a un profeta que vuelve de un lento peregrinaje. No entendía que hacía un tipo como Semilla manejando camiones hacia la Patagonia, no podía comprender como paró sin que le hiciera señas, ni podía sospechar como se arreglaba para no aburrirse de tanta soledad.

- La ruta me eligió a mí, el camino terminó por conquistarme – Le dijo sin que pregunte nada - Trabajé en fondas y cuarteles, en fábricas, fui empleado publico y taxista, fui cronista de guerra y pescador de centollas. Lo intenté todo en las ciudades, viajé por el mundo y en cada ciudad volví a intentarlo, pero falle una y otra vez. No soportaba ver las mismas caras amargadas a las mismas horas, escudándose en el mismo disfraz. Cuando lo pude asimilar volví al barrio donde nací y decidí que nunca más tendría algo que se pueda llamar casa, salvo esa montaña de fierros con la que me muevo.

- Parece una sabia decisión – le contestó Johnnie – Yo en cambio jamás podré vivir más allá de las avenidas.

- Si, sobre todo las del lugar donde te recogí – le gritó soltando una carcajada.

- Esto es un espejismo, Semilla. En estos momentos no tengo más voluntad que la necesaria para ser un espectro que se arrastra a favor del viento, sin destino fijo.

- Lo supe cuando te subiste a la cabina sin preguntarme adonde iba.

- Cualquier lugar me queda bien mientras siga en la ruta hacia ninguna parte.

Friday, February 22, 2008

UNA BANQUINA ESTEPARIA



La ruta se va comiendo al desierto, lo mastica lentamente. El desierto va cediendo, se hace cordillera y noche con la distancia. Se disipa en sus propias entrañas. El camión empieza a crujir bajo el peso de los kilómetros. Un puñado de neumáticos perdiendo caucho por el asfalto. Semilla decide apiadarse de la bestia y tomar un respiro entre unos álamos dorados. A Johnnie nada le resulta más acertado. El lugar tiene algo que invita a refugiarse y dejar que pase la noche.

Bajaron del Scania con el sol en retirada y el hambre pidiendo paso. Acomodaron unas sillas entre los árboles, juntaron unas ramas y se enfriaron en el infinito silencio.

Antes de que la luz se perdiera por una noche en las vísceras de la tierra, Semilla se incorporó de un salto. Caminó decidido hacia el camión, abrió la puerta y volvió a bajar después de unos minutos. Llevaba una escopeta de un solo caño, una gorra con linterna en la frente, una caja de cartuchos sin abrir, y la cara del hombre que está oliendo su presa.

El Rompevidrios lo miró entre preocupado y vacilante. ¿Qué podía ser peor? Jugaba con una rama dibujando círculos en la tierra. Alguien pagaría aquellas balas con su vida, pensó. Semilla cruzó un alambrado y se metió de cabeza en la oscuridad.

Solo, tomando un vino bajo las estrellas, en la fría espera, encerrado en la incertidumbre, Johnnie repaso la historia. La deshizo en cuadros cinematográficos, y comenzó a bucear errores y aciertos. Había hecho ese ejercicio decenas de veces, hasta enloquecerse, mientras daba vueltas en las sábanas. No buscaba entender, quería consolarse en el escondite del dolor.

Thursday, February 21, 2008

Nuestra receta

es tratarnos como dos buenos animales
que se prodigan espacio, calor
alimento,
protección.
Cuando uno se llenó el buche,
guarda en la fosa oral para el otro,
que está herido en rincón
y no puede moverse.
Guarda allí, y le lleva
y le pone, de su boca,
esa pasta nutriente
masticada
en las fauces.
Lo hacen los gran daneses
¿Por qué no lo haríamos
las pequeñas personas?

Charly y el final cansado

Charly
creo que estoy cansado.
Ayer me pasé de parada
una vez más en el mismo mes.

Charly, ya me duelen las piernas al acostarme
no es lo mismo que cuando eramos jóvenes
y las galerías estaban viejas pero llenas de vida.

Charly,
hoy veo todo a través de una cortina
que me quita los colores y me narcotiza el olfato y el tacto
y los rosales se mueren de viejos
mientras se trepan a los techos.

Charly
me angustia esta vegetación,
tanto verde
y creo que estoy cansado.
Duermo demasiado poco
o estoy demasiado tiempo despierto.

Charly, ya no puedo levantar los pies al caminar
y los arrastro por la galería
tan muerta y salvaje.
Creo que estoy cansado
porque ayer me pasé una parada
por segunda vez en el mismo mes.

Charly no me hables de esas cosas
a veces es mejor no enterarse
es mejor engañarse con que la gente es como uno cree
y no como es o como otros ven
pero no me hables de esas cosas.

Charly
esos jarrones y los manuscritos
mejor tirarlos ahora
hace años que espero la oportunidad de usarlos
y estoy cansado,
y nunca llega.

Charly,
ya me duelen los brazos al vestirme
apago la luz
y me duelen los brazos al vestirme.
No quisiera terminar de noche
justo en mi mejor momento
en medio de tanto disfrute,
no quisiera terminar de noche.

Charly,
poneme una almohada bajo los pies
y apagá la luz al salir,
porque creo que estoy cansado
y ya me pasé de parada otra vez.

Tuesday, February 19, 2008

No tengo orquesta

Allá por el año 1977, años procesistas si los hay, concurría al Jardín de Infantes N°5 en el barrio de Parque Patricios, en Av. Caseros y San José, justo enfrente del Parque España. El lugar ocupaba casi toda la manzana y lo que recuerdo con claridad era el enorme parque lleno de árboles y juegos que tenía, paraíso de los preescolares. Todavía no habían llegado las escuelas secas del Brigadier Cacciatore y disfrutábamos de algún verde.

El Jardín estaba lleno de personajes... a la portera, que se llamaba Amalia, todos le teníamos pánico. Pero para compensar estaba Horacio, que nos regalaba caramelos y siempre tenía juguetes innovadores en el galpón de chapa que se levantaba al fondo del parque. Horacio además tenía su casa pegada a la escuela, en la misma manzana, casa que se había ganado apostando en las carreras.

La directora, Delia Gutierrez, lo había visto a Gardel en el teatro de su pueblo, que si no me equivoco (ya me falla la memoria después de tanto tiempo) era Chivilcoy. Lo que sí me quedó marcado a fuego fue que esa noche, ella, una hermosa señorita de 15 años le había gritado desde el palco del teatro:

-Silencio Carlos, por favor, ¡cante Silencio!

A lo que El Mudo, con su sonrisa indeleble respondió:

-No tengo orquesta, piba... No tengo orquesta.

Monday, February 18, 2008

Saturday, February 16, 2008

Pescador Pescado por La Nación


El tambor de Waits
Por Gabriel Sánchez Sorondo
Vinciguerra
53 páginas
$ 15

Autor
Nacido en Buenos Aires en 1965, Gabriel Sánchez Sorondo es, además de poeta, músico y periodista. Ha escrito libros de divulgación, entre ellos la guía de restaurantes Buenos Aires populares y Cafés de Buenos Aires en coautoría con J. M. Peña y H. J. Spinetto. Obtuvo en 2002 el Primer Premio en el Concurso Abierto de Poesía de la Universidad de Belgrano. En poesía publicó Carne sobre carne y Buenos Aires Sacado.

Tema
Calles, chicas, tragos; noches de insomnio y de calor, y más que eso: el amor y la guerra. Paisaje urbano destilando en cada uno de los poemas de El tambor de Waits. Aguafuertes o crónicas en clave lírica dibujan el rostro de un hombre que es (o puede ser) todos los hombres, como si el mundo, al concentrarse en el poema, se revelara ecuánime, ni bueno ni malo, ya que, "Todas las peleas/ parecen/ absurdas/ pasando la rompiente."

Opinión
Con un fuerte sentido del metro y el ritmo, Sánchez Sorondo crea la música para las microhistorias que circulan en sus poemas. Más allá del tambor del título -homenaje cantado a Tom Waits-otro tam tam recorre los versos, como si una segunda voz, más allá de la evidencia de las palabras, de la superficie, se animara a rapear "al fondo, el verde selva de Barracas", la universalidad de los endecasílabos.

Sandro Barrella

Thursday, February 14, 2008

Envasado en Origen


Acá no van los slogans de calidad y servicio
Andresito se toma sola y como viene.

Nada de alimonada, menta fresca o de exportación,
nada de gusto a naranja o hierbas aromáticas
ni de palos, ni sin palos, ni pez palo, ni a palos
ni de casas de herreros ni de cuchillos.

En Capital no se consigue.
Tan solo aparece en las entrañas de Superdetodo
o en las estanterías de CLC
La vimos con Valentín y Sancho en Las Flores y nos cargamos ocho kilos
y en otra oportunidad Lea la asaltó en Salto.

Y en Dolores
porque Andresito es el dolor del gaucho
de la moza que agita el tibio pañuelo y luego se va achicando

Andresito no es de los Deli de Palermo Soho
No está a gusto en las superboutiques de Santa Fe
que le venden mate, bombilla y yerba a la rubia recién aterrizada de Wisconsin.

Nada de buscarla en el Norte.
Nada de cadenas francesas
ni de marketing directo o business to business.

Andresito crece en la selva. Ahí nomás de la triple frontera,
donde el Mossad, Hezbollah y la CIA intercambian guascazos
cebando unos amargos.

Wednesday, February 13, 2008

Cuesta Abajo

La lluvia
a veces vomita azufre
o muerde distancia
mientras clava sus colmillos en la arena
y saliva la noche
con el asco de los vencidos.

La lluvia
castiga con granizo y emborracha
miente con susurros calculados
como bucaneros de prostíbulos suburbanos
donde las putas valen más que un Etiqueta Azul
pero cobran menos que un valet parking.

No se conforma con una moneda, la lluvia,
invoca miradas que no tienen ojos
ni pestañas;
fuma un extraño porvenir en cuentagotas.

La lluvia cae pero no lastima.

Acaricia la nada en caída libre.

Retrato de familia


Que maravilla pertenecer....


Tuesday, February 12, 2008

Missed Opportunities

Cuatro veces se cruzaron.
La primera él no pudo.
La segunda ella ofreció pero él no subió.
La tercera ella subió pero no quiso.
La cuarta ella no pudo.
Cuatro veces se cruzaron.

Sunday, February 10, 2008

Hola Muchachos

Noche desvelada, tratando de entender un poco que pasa en esta mente sin fondo. Como siempre, no hay respuestas... a esperar, a dejar que todo ocurra.
Pero bueno, algo salió de todo esto. Como por ¿casualidad? cai en este colorido rincon del universo cibernetico y fue lindo encontrarme con todos ustedes. Una muy agradable companía, che.

Disfruté mucho cada una de sus intervenciones. Los felicito y les mando un abrazo muy grande a todos. En especial a Maro .. ehhehe MAROOO!!!!!!.... LOCOOOO!!!!!!!!!!.... Portate bien, che!...jeje

Espero que nos veamos prontamente.

RAMON

Saturday, February 09, 2008

No country for old men


Ed Tom Bell: It starts when you begin to overlook bad manners. Anytime you quit hearing "sir" and "ma'am", the end is pretty much in sight.

Friday, February 08, 2008

Never Marry


As Camille Pisarro walked towards the door, Corot cried:

"One more thing,. Take this as advice from an old man. Never marry. The road is too long and hard. Families, responsibilities weigh heavily; they prevent you from getting your work done. Women, yes; love, too. You are already in love with art. Remain faithful."

Besides, Camille loved Paris bohemia

He walked to the brasserie Andler, two doors away from Coubert's studio. Gustave Coubert gave Camille a shouted welcome.

"So you did come. Meet my colleagues. Soyez unis commes les doigts de la main..."

Tuesday, February 05, 2008

Bitácora de la Alcaldía

Securite! Securite!

Alcamar Navarino
a 60 nudos
en un Puerto chileno
de Canal Beagle
refugiados de Yámanas
y Buttons.

Securite! Securite!
Se cierra hasta que amaine,
si amaina
y no descoce.

La Grande
tan cerca e inalcanzable
por ese aullido
que se pasea entre islotes
y pesqueros fondeados

Lima Tres Papas! Lima Tres Papas!
en las narices del hielo.
48 horas en la cueva de los náufragos
y no amaina.

Monday, February 04, 2008

Suerte de Campeón

Para tener la suerte del Campeón
me falta tomar mucha sopa,
miles de letras,
hasta palabras enteras.

Antes
de poder salir en Porsche negro
y pedir una botella de Cristal en la barra,
meter la nariz en esos cabellos de ángel
y oler a pino,
debo pasarme en las curvas
y sobrevivir a las enfermeras
que me quieran curar con aspirinas.

Para poder entrar con las luces
sobre la capucha de mi bata
mientras la cámara me mira y suena Estrella del Camino,
(Gillan te pone fuego en los ojos)
debo ganarme el pan de cada noche
prometer mucho y cumplir poco
y practicar la sonrisa frente al espejo.

Acostumbrarme a no levantar nunca el pié
treparme a los postes de luz
y no saltarme un hervor.

Pasearme por Palermo rodeado de perros
no parar con la Vitina
y dormir abrazado a cualquier tronco.

Me falta tomar mucha sopa
para tener la suerte del Campeón.

Friday, February 01, 2008

Vente a la legión



En un día otoñal de hace muchos años, un teniente legionario chusquero apareció por el cuartel del Regimiento de Ingenieros estratégicos conocido como RETES-22 sede además del generalato de Ingenieros del ejercito español.

En ese cuartel me encontraba haciendo la mili, todavía en la fase anterior de la jura de bandera, llamada “La instrucción”. Esa mañana nos convocaron a los reclutas de mili forzosa, al salón de actos. Desconocíamos el motivo, pero nos supuso una novedad que despertó nuestra curiosidad.

Recuerdo que nuestro Capitan Instructor, nos presento a el perfectamente reconocible legionario. Por su uniforme de camuflaje prieto y arremangado, en perfecto estado de revista, y su indiscutible gorra en forma de popa de barco invertida y gracioso cordoncillo amarillo en su parte mas alta.

El era rubio, de mediana edad, moustachero y tan bajito como fornido, llevaba un perfecto tatuaje en su prominente bíceps. Nuestro Capitan nos los presentó como instructor de la legión en su destacamento de la desértica ciudad andaluza de Almeria, otrora conocida por sus spaguetis western.

Comenzó a hablar el Capitán.

- Señores, en orden de no obligar por destino forzoso a irse a la legión, los que pertenezcan a este insigne cuerpo serán reclutados de diferentes cuarteles como este. Por ello el Teniente os va a explicar que hace el cuerpo de legionarios por si alguno quisiera irse con ellos.

- Gracias capitan¡, - se apresuró el legionata a interrumpir al Ingeniero para explicar sin mas preámbulos las maravillas de ser legionario- amigos – continuó, el cuerpo de la legión es el orgullo patrio, las personas mas preparadas y la mejor forma que vuestro pase por el ejercito sea lo mas provechoso posible. Quien quiera venir con nosotros, sin más dilaciones, que se levante y se ponga firme detrás mía.

En ese momento nadie se levantó, era evidente pues parecía que iba a contar mas cosas.

- Los legionarios conseguimos una forma física espectacular, nos levantamos pronto para correr diez kilómetros, tiene que ser pronto para no achicharrarnos bajo el desierto de Almería.

Creo que en ese momento pude escuchar alguna tos, y algún chirriar de alguna silla, pero nadie se levantó.

- Luego nos pegamos un desayuno de muerte, cereales, pan tostado, mermelada, dulces, el mejor café señores de todo el ejercito español ¡ venga señores no sean tímidos a ser los prímeros en levantarse. Sé que muchos lo están deseando.

El teniente parecía cada vez hablar más alto, parecía un político en un mitin.


- Después nos hartamos a practicar tiro, hacer simulaciones de técnicas de combate, somos los más duros, ¿Me ven a mi? Soy nada en comparación de lo fuerte que se ponen ustedes. He visto a gordos ponerse en forma en dos meses, es algo prodigioso. Vamos, todos los que deseen ponerse mas cachas que los maricones de gimnasio que se vengan conmigo.

Cada vez que decía algo se quedaba parado esperando a que alguien se levantara, se le empezaba a ver contrariado pues nadie todavía se había encaminado a la pared. Cada vez hablaba mas nervioso

- Luego viene la comida, estupenda, siempre para elegir macarrones o arroz de primero, carne o pescado de segundo. Mucho mejor que el rancho que les dan aquí… y lo mejor de todo¡ todos tenéis derecho a una pepsi de dos litros ¡¡¡¡

Lo de la pepsi pareció impactar en algunos que se miraban, pero nadie se levantó.

- No se crean que sólo físico, después de comer vamos a la biblioteca tenemos libros, revistas, comics, buah, una maravilla para descansar antes de salir por la tarde.

Tuvo que seguir rápido porque ahí no debía estar acostumbrado a convencer.

- Luego salimos por la tarde, paseamos por la ciudad, con nuestros uniformes, orgullosos de ser legionarios. ¡Pueden tomar cervezas pues están descansando¡ Incluso nuestra cantina es espectacular, con futbolines, mesas para jugar a las cartas. La gente lo pasa en grande, van a hacer grandes amigos que nunca olvidarán.


Se paró un rato, nos miraba esperaba algún movimiento, pero nada. Creo que farfullaba por lo bajo, sus ojos se empequeñecían al mismo tiempo que cada vez apretaba mas la boca.

- Muchos luego se quedan y hacen carrera militar como yo. Pueden tener su futuro solucionado ¡ - En ese momento hizo un pequeño silencio, nada, ni uno de los 100 que seríamos quería ser legionario. Entonces cambió de voz, se hizo más coleguilla cercano

- Tienen noches de permiso, a irse a tomar copas juntos, divertirse, jugar al billar. – de nuevo silencio nadie se levantó, ya casi desesperado, se reservaba munición y con un tono ya totalmente de colega gritó en voz más alta aún:

- ¡Joder, señores, la legión, el legionario, ya saben eso que significa, o ¿se lo tengo que contar? – rió como para revelarnos un secreto que desconocíamos - A las chicas de Almería, ay las chicas de almeria, espectaculares ellas tan morenitas, andaluzas. ¡Señores! Cuando ven a un legionario paseando con el uniforme y se cruzan se les pone los chochos como cráteres¡¡¡¡¡

En ese momento uno de los reclutas se levantó de inmediato. Otros cuatro instantes después y al mismo tiempo le siguieron.


One Bourbon, One Scoth one Beer - Declaración de principios

Estimados pescadores, por su posible interés reproduzco e mail enviado a un gran guitarrista, del que de momento quiero mantener el anonimato por respeto a él.

Es una declaración de principios perfectamente encuadrable en nuestra insigne etiqueta por Alcohol al arte:


Estimado Blues man X:

Bueno es importante saber que no soy un escritor profesional (no de momento) pero que llevo escribiendo desde tiempos que no recuerdo ya, y que la literatura y la música son dos de mis tres grandes aficiones junto al cine. Soy muy aficionado a todo tipo de músicas con especial preferencia por el rock sureño pero muy aficionado a otros estilos como el hard rock, el blues, la psicodelia y el country. Tanto amo la música de aquella época que he escrito una novela sobre un guitarrista de San Francisco de ficción de los años setenta. Te adjunto la novela donde podrás ver personajes reales entremezclarse en la historia como pueden ser mi gran admirado Duane Allman, junto Janis Joplin y Carlos Santana (entre otros). Te puedes hacer una idea de si mi estilo y conocimientos pueden ser de utilidad (un libro de corte ensayo sería algo diferente, por supuesto). también he escrito otra novela, alguna que otra canción (tuve en la adolescencia un grupo llamado Kentucky Bourbon que es mejor no recordar...) y una loca adaptación de una obra de teatro español, convertida en la historia de un escritor de tangos ciego de Buenos Aires.

He escrito varios artículos sobre músicos y ahora pertenezco a un blog de amigos de Buenos Aires (soy el único gallego, los demás son grandes escritores porteños), donde te adjunto un artículo mío sobre el último concierto de Johnnie Winter en Madrid. Conozco muchas ciudades donde has viajado y/o vivido como son Nashville, Menphis o Austin; verdaderos templos de la música donde la emoción siempre me ha llenado de sentirme en un paraiso para mi. Me gustaría tocar bien, pero Dios ni me dió oído ni paciencia para la música que exige tanta dedicación y arte.

No quiero enrollarme mucho más, podría tirarme diez páginas contandote cosas pero no es cuestión de que te duermas sobre el ordenador; tan sólo que te agradezco que tengas en consideración que una persona como yo pudiera serte de ayuda para llevar acabo un libro sobre tus vivencias. Creo que tengo muy claro como debería ser, pero bueno eso es para hablarlo más detenidamente. Desde luego compartir esa experiencia con tu banda y contigo, es suficiente como para que si se diera la colaboración sería desinteresada para mi, mientras me pagarais siempre que quisiera un one bourbon, one scotch, one beer en cualquier lugar donde se pueda tener una grata conversación o escuchar buena música.

Creo que ahora estás en Menphis, que suerte¡ Te deseo lo mejor y te agradezco la atención prestada.

Lo dicho, aquí tienes el nombre del blog: www.pescadoresanonimos.com Mi artículo sobre Winter (en la misma web tengo otro sobre The Marshall Tucker Band que demuestra mi irremediable preferencia por estos virtuosos vaqueros):