Sunday, August 09, 2009

UP: Algo tan sencillo como la historia de un viejito de 78 años que trabajaba como vendedor de Globos.


Un gruñón chocho, no agraciado, no hablador y bastante torpón.

¨Up¨ es otra obra maestra de los chicos de la Pixar. Después de la aparentemente insuperable Los Increíbles estos genios de la historia cambian de tercio y dejan una obra sublime para todos los públicos. Esto último es lo más impresionante. Up es una película para niños, que los mayores disfrutamos. Su contenido y moralidad es, a mi entender, lo mejor. Los niños no van a deducir moralejas de la película pero con toda seguridad van a quedar en su subconsciente para toda la vida.

Por ejemplo es una apología a las personas mayores que en nuestra sociedad actual hemos dejado de valorar. Las personas mayores tienen la experiencia, la acumulación de cariño y el saber actuar correctamente de una forma innata. Quizás estamos sobrevalorando el más inteligente, mas fuerte, más rápido sobre el mas listo, el mas mañoso, el que mejor economiza los movimientos.

Pero además es un canto a la aventura al mismo tiempo que relata que la mejor aventura para una persona puede ser el pasar toda la vida feliz con la persona que ama. No todo es Walt Disney en la película lo que le da un valor añadido pues de tener cosas tan intensas como el fracaso, el héroe caído, la avaricia, la injusticia y el egoísmo (hasta el delicioso protagonista que no por menos puedo evitar pensar que es Spencer Tracy en sus últimas películas) lo es en una ocasión.

La película empieza con un prologo de técnica virtuosa. Parecemos encontrarnos con un Orson Welles resucitado. En 15 minutos se refleja la vida del protagonista, empezando en un hecho concreto (el mas importante de su vida) y las consecuencias de él. En una consecuencia de planos secuencias mudos aprendemos a amar a esa pareja que no pudo tener hijos y que todos hubiéramos querido tener como padres, la muerte de la mujer y el sentimiento de soledad de él es tremendo (Scorsese debía revisitar el comienzo de Casino o el efectista Moore mirarse al ombligo cuando ha intentado hacer lo mismo en sus documentales).

Son quince minutos que en la mente de un niño le puede dejar agotado, eso lo saben los guionistas y entonces deciden comenzar la película de verdad dándole contenidos infantiles para que nos relajemos un poco del nudo que se nos has creado en nuestras gargantas. Aunque incluso esos ‘toques infantiles’ (perros que hablan por el collar, una especie de Tucán gigante, una casa que vuela con globos, ¿Guiño a Miyazaqui?)son un engaño que tiene una explicación bien madura en el desenlace.

Quiero terminar destacando la escena más importante de la película. No voy a desvelar los detalles, pero es cuando nuestro personaje abre el libro de aventuras de su mujer creyendo que nunca lo había continuado desde que eran niños.

En lo personal no puedo evitar en pensar cuanto hecho de menos a mis abuelos maternos fallecidos hace unos dos años.

5 comments:

Homero Beltrán said...

No tengo tan presente a los abuelos, la última nos dejó (me refiero mi familia) a comienzos de los ochenta. Lo que sí vi de refilón fue la mitad del trailer o avance (cola suena horrible) de esta película en un noticiero de la noche en un canal de aire, con lo que no le pidas que eluciden algo. La vagancia (e inseguridad posiblemente) llevó a la "cronista de espectáculos" a apenas hacer unas tibias referencias argumentales al son del trailer (todo un género en sí mismo). Percibí que se trataba de algo interesante, y ahora que lo dices lo confirmo, con todos los ingredientes para el golpe bajo y sensiblero, pero no (lo dices todo con lo del efectismo de Moore). Pues mi apuesta entonces por esta peli, viejo!, gracias por el consejo y la confirmación de aquella intuición. H.B.

Maro said...

Se agradece la reseña.
A mí las películas de Disney me gustan.

Una de mis favoritas se llama "Una bruja en apuros", es de los años 60, creo.
Lo que me gusta de ese filme es que en un momento se arma un picadito de fulbo entre animales de la selva. Esa partecita la vi 100 mil veces en súper 8.

Nachete said...

Vayan a verla y confirmen. Ojo no olviden que es sobre todo una película para ninos. Vayan con mente de nino.

Gilgalad said...

Yo sin embargo tengo bien presente a un abuelo tuyo, Homero.

Gilgalad said...

Releyendo tu comentario, yo no vi la película pero el trailer me hizo acordar muchísimo a Miyazaki.