Wednesday, January 06, 2010

Ese que lo tiene todo


y lo tuvo todo.
Tiene su Mercedes bien broquelado,
su horno con termómetro,
su casa en Castelar,
una pequeña y selecta bodega de uvas japonesas y pasas viejas.
El seguro de retiro en la Isla de Man
y un oficial de cuentas que te atiende el teléfono en inglés de Oxford.
Tiene sus tres semanas de vacaciones,
fila-en-el-banco-exclusiva-para-clientes.
Tiene sus discos de oro -en su época supo soltar-
que escuchaba a Gardel con su abuelo
cuando Gardel no era Gardel y su abuelo ya era abuelo.
Tiene una modelo de mujer y otra de amante.
Con la mujer, lo unen dos hijos.
Con la amante, las ligaduras de las trompas de Falopio.
La lista de sus activos.

También vendió bastante:
vendió caballa en el puerto de Montevideo a los trece,
y su primer Fusca-blanco-brasilero
como chatarra, después de matar un árbol.
Tuvo sus libros, se quemaron a los 451,
su magazine, sólo tocó dos cintas que vinieron de prueba en la caja original, una de Abba, otra de Frankie Vallie and the Four Seasons,
su bicicleta-cucharitas-de-helado-en-los-rayos,
que se hizo vieja bajo la lluvia.
Tuvo un padre
y un lobo que lo supo olfatear y cuidar.
Algo de ese espíritu se le adhirió al alma.
Un hormiguero propio en el cual se escondía
y unas borlas de seda para decorarse la cara durante el Carnaval.
Una juventud oscura en Barracas, una escapada a Londres hasta que llegó la inundación.
La lista de sus pasivos.

También tuvo su Lisbeth Salander,
su fogwill-muchacha-punk-piercing-tatuaje-en-la-espalda,
tojo-clan-dragón-de-Dojima
Punk verdadera, de alma voraz y estética dakota.
Una chica que escupía con amor, que le mordía el lóbulo cuando cogían, y ese que lo tiene todo sentía que le partía el cerebro.
Una punk de los subtes, de miradas asesinas, de dormir en el banco de la plaza, de noche de patio de comisaría.
Una punk verdadera, de las del 76 pero en el 86 La Boca-Aeropuerto Ezeiza-Último Asiento-Puerta-Ventanilla.
La cambió por un puff relleno de goma espuma y un saque de merca en Constitución.
El vendedor no pudo creer su suerte. La punkie tampoco.
La preñó y se fue duro, con la sonrisa pegoteada.
La lista de sus quebrantos.

7 comments:

Sancho said...

Me da curiosidad ¿Hay un "ese" o es una conjunción de personajes que juntaste? Muy bueno

Gilgalad said...

No hay un "ese".

"Ese" somos todos aquellos que alguna vez soñamos salir con una verdadera punki, o los que alguna vez la tuvieron y la perdieron.

Me alegro que te guste. A mi también me gusta bastante.

el gloria said...

casi casi una cancion
(leandr cohen?)

Nachete said...

Loco esta genial

Nachete said...

Es una mezcolanza expectacular

Maro said...

Galad, es un poemazo.
Me gusta el modo teatral en el que coronás cada "escena?": La lista de sus activos, las lista de sus pasivos, la lista de sus quebrantos.
Hay un tema de Lou Reed en el que a mi entender le canta a una chica punky como la que vos decribís.
Ahí va la letra:

Wild Child

I was talkin' to Chuck in his Genghis Khan suit
and his wizard's hat
He spoke of his movie and how he was makin'
a new sound track

And then we spoke of kids on the coast
and different types of organic soap
And the way suicides don't leave notes
Then we spoke of Lorraine
always back to Lorraine

I was speakin' to Phil who was given to pills
and small racing cars
He had given them up since his last crack-up
had carried him too far

Then we spoke of the movies and verse
and the way an actress held her purse
And the way life at times can get worse
Then we spoke of Lorraine
always back to Lorraine

Ah, she's a wild child
and nobody can get at her
She's a wild child
oh, and nobody can get to her

Sleepin' out on the street
Oh, livin' all alone
without a house or a home
and then she asked you, please
hey, baby, can I have some spare change
Oh, can I break your heart?

She's a wild child, she's a wild child

I was talkin' to Betty about her auditions
how they made her ill
But life is the theater, is certainly fraught
with many spills and chills

But she'd come down after some wine
which is what happens most of the time
Then we sat and both spoke in rhymes
Till we spoke of Lorraine
ah, always back to Lorraine

I was talking to Ed who'd been reported dead
by mutual friends
He thought it was funny that I had no money
to spend on him

So we both shared a piece of sweet cheese
and sang of our lives and our dreams
And how things can come apart at the seams
And we talk of Lorraine
always back to Lorraine

She's a wild child
oh, and nobody can get at her
She's a wild child
oh, and nobody can get to her

Sleepin' out on the street
Oh, livin' all alone
without a house or a home
and then she asked you, please,
oh, baby, can I have some spare change
Now can I break your heart?"

She's a wild child, she's a wild child.

Gilgalad said...

Gracias muchachos. Pongámosle música entonces!

Maro, buenísima la letra del viejo Lou. No la conocía.