Wednesday, July 16, 2014

Lo ve en imágenes veloces y mudas

porque se siente harto
de tanta palabra y de tanto interrogante.
Transformarse en un gato silencioso y desafiante
de las realidades que se curvan y se suceden en la pantalla
casi sin pestañar
pero mudas.
Sin el aturdimiento de las palabras, sin la sensación de estar siendo forzado
porque indefectiblemente el silencio es de a dos o no es.
Harto de explicarse
con herramientas viejas
ante el auditorio que quiere otra cosa
porque esto no tiene rating y menos lo tiene lo propio, lo que guarda para sí.
Y es entonces que baraja barajar
o irse al maso y dar de nuevo, dar otra vez, recomenzar
desde cero
solo
mudo
sin hablar
y la pantalla que monologa
no espera respuesta
ni interroga
ni es violenta, o tal vez sí, pero es sorda
sin presión
y dando espacios.
Desazón.

Monday, July 14, 2014

Dos años atrás



te subiste a un viento
te uniste a los planetas.
Y me cayeron encima las montañas
y me quedé sin sangre
justo al empezar esta ruta de la orfandad.
Te juro que escuché los consejos
empezando por los tuyos, los de toda la vida,
esos que constituyen el anclaje a mis remanentes intersticios de cordura,
los oí
y recibí el consuelo de la tierra entera.
Pero nunca te preparan para dejar de ser hijo.
Te extraño, obsesivo.
Te encuentro
en tu olor, que quedó en tus camisas y en tus pañuelos
en el recuerdo de tus dedos retorcidos del piano
en mi cara ahogándose en tu pecho
en tu mano tomándome del brazo
en cada calle que cruzo.
En los cafés del Abasto donde ensayaré esta noche
en estas letras inconformes que ahora escribo.
Fuiste tan grande que no entrás en los recuerdos de uno solo sino de todos
de los que cobijaste con tu mirada llena de años
y de los que no te conocieron
pero aprendieron a amarte a través mío
como la mujer que me acompaña, me ama y me soporta
que es mi luna y mi motor.
Te encuentro sí,
y con cada encuentro, con cada pensamiento que me atraviesa
más y más aún
te extraño
cada día.