Saturday, June 27, 2009

Un lugar perdido en el mundo - Luang Prabang



Existen lugares especiales, en muchas ocasioes originados por un encuentro del hombre con la naturaleza. Buscando un entorno que llenara sus espectativas, ese lugar único se convertiría en un asentamiento de culto. Machu Pichu es claramente uno; con seguridad el más conocido. Angkor y sus imponentes edificaciones en pleno bosque selvatico de Camboya es otro; más cercanos pero no por ello peor es la imponente situación de la Alhambra de Granada.




Hay muchos más, algunos que conozco y otros que quiero visitar.




Uno de ellos es Luang Prabang, había leido mucho de aquel lugar y me parecía interesante. Pero nunca pensé que fuera tan impresionante como los mencionados anteriormente. Cual fue mi sorpresa el descubrir que no desmerecía a ninguno de los nombrados anteriormente




Luan Prabang, en el epicentro de Laos, es una península formada por la intersención del río Mekong con uno de sus mas importantes afluentes. Es el lugar mas selvatico de todo el cámino del río tan arrebatador como imponente y evocador. Esta rodeado por varias sierras para dotarle una vista única




En ese imponente entorno natural, la corriente budista del sudeste Asia decidió convertirlo, o por una serie de casualidades se convirtió, en el centro espiritual de ellos.




Es por ello que se ensalzan 33 imponentes Wat (Templos budistas) que sin duda son 33 obras maestras de la arquitectura.




Entre ellos, te ecuentras con templos grandiosos, equivalentes a nuestras catedrales Son cuatro. Supongamos que en una pequeña ciudad española como Todelo estuvieran las catedrales del mismo Toledo y además Salamanca, Burgos y León

Pero esto no es todo, porque no fue lo que más me impresionó, si no que cada diez pasos te econtrabas detalles artísticos en el resto de los templos "menores" que suponen imponentes contribuciones. Algunos con tallas de Buda excepcionales, otros con sensacionales frescos relantando la vida de Buda, otros guardados por unas increibles esculturas de guerreros Chinos de Xaolin.

Para dejar el entorno cuadrado,algunos colonistas franceses, gobernadores o enamorados del lugar cosntruyeron sus palacetes ahora conservados como hoteles o academías.

Todo en medio de la selva, en cuanto pasas a templos mas alejados notas que estás en un lugar totalmente natural donde cualquier serpiente o escorpión te puede asustar

Luang Prabang es una maravilla, con su insoportable calor, sus tábanos del tamaño del colibrí, mosquitos asesinos y enormes escorpiones. Su gente natural y simpática, y sus tremendas escalinatas al río o a la montaña.

Un lugar para desaparecer y meditar. Un lugar para no olvidar nunca y visita obligatoria de cualquier persona que tenga un espritu viajero.

Thursday, June 25, 2009

Los últimos días son de descanso.


Si la tierra guarda una cama
y las copas elaboran suficiente espuma,
sería razonable brindar con la botella sobrante de la liturgia
a expensas del cura y de la Iglesia.

Repetir la habitual ceremonia del vaciado
de la palmada, la carcajada y el canto.
Rapiñar semejante derroche de acústica
dedicado a tanto hueso sacro, a tanto desorejado sin jugo.

Cantar hasta tragarse una tormenta,
vocalizando truenos hasta que duela
y que la percusión la pongan los cristales a costa de su propia integridad
y a riesgo de muchos.

Beberse el cielo norturno hasta trastabillar,
tener que abrazarse para sostenerse pero únicamente hacerlo por afecto.
Beber hasta rebalsar, hasta que no quepa una gota
y se oscurezca lo más obvio.

Brindar por el Diablo y las mujeres
(pero tan solo una vez)
por los amigos que nos dejaron en el camino
los más queridos,
que tuvieron la poca delicadeza de morirse antes,
por la noche
los hogares
y los lobos que ya vienen.

Se los oye y se los huele.
Ya están aquí, un poco antes del tiempo,
porque los últimos días son de descanso.

Sunday, June 21, 2009

21 de junio


Las veredas de la Av. Entre Ríos están plagadas de mierda y de cráteres.
La andrógena voz de Antony canta Candy Says, el alquitrán y la nicotina me muerden los pulmones a cada bocanada.
Y esos tipos, que felices se los ve cargando a sus hijitos recién estrenados, y bolsas de colores con moños gigantes.
No hay duda, hoy comenzó el invierno

Thursday, June 11, 2009

El Tío Ignacio


Alguna vez vi
como se mezclaban
mis lagrimas con la lluvia
en el cementerio donde leyeron
las estrofas de Lorca.
Despedíamos las tardes inocentes
donde el viejo y la pipa
daban cátedra
hablando de amigos, novelas y poetas
y de milongas
que sonaban entre las glicinas
y los asados
de la estación Coronel Boerr.
Se estaban yendo
los toreros
las lejanas historias de aquel Madrid
del imperio y las cenizas
donde corrían los jamones y las balas
se metían en el cuero
de unos tíos en fuga
por el fondo de la plaza del Ángel.
Se iban, al galope lento,
por los caminos del oeste
entre domadores de tobianos y azulejos
las sobras de un tiempo que
si existió,
fue apenas en la melodía imaginaria
con la que el viejo tejía
aquellos recuerdos inalterables.

Tuesday, June 09, 2009

The Greatest by Mata

Monday, June 01, 2009

No hay mejor asado a la olla


que el que prepara la Norteña.
Su puesto de cocina se inspiró en Le Corbusier
quien nunca en su vida caminó por el Mercado 4
entre yuyos, mandioca, porongos, zapatos y celulares.
Pero detrás sus lentes
se vislumbran años de elaborar la machine à mangier.

El racionalismo de la Norteña es a prueba de balas,
que, modestia aparte, también abundan por el Mercado 4.
Es el racionalismo de crear el almuerzo de cada mediodía
para las hordas de changarines, puesteros, mecheros, punguistas,
vendedores ambulantes, periodistas, alcahuetes, matarifes,
madrecitas yuyeras, turistas y botones
que desfilan por su puesto lilliputiense
de ocho sillas estrictas, pegadas a la mesa,
evitando los problemas limítrofes.

Dar de comer a cincuenta personas desde una pileta pequeña,
cuatro hornallas, tres bandejas, dos ollas y una sartén.
Dar de comer a cincuenta. Dar de comer.
No vale quedarse en la cocina si no hay cocina. O mandar al mozo cuando no hay mozo
pero la cola de hambrientos baja la escalera,
esquiva el consultorio odontológico
y alguien tiene que ponerse la camiseta, hacerse cargo, dar de comer.

Como si fuera poco, además, la Norteña tiene nombre de cerveza.
Ya cae amable, y todo por el mismo precio.
Es suficiente con sus callos y su delantal de Alderete Presidente 2008,
la única prebenda que obtuvo de los Colorados,
además de una gestión por la pensión del marido,
que todavía no le salió.
Siempre agradecida, la Norteña, siempre dispuesta
siempre con la luz esa que tienen los cocineros
que saben que dan de comer
y que eso es tan importante como curar o conversar.

Y no hay mejor asado a la olla.