Wednesday, July 21, 2010

Al final resultó que de noche todos los gatos eran pardos

Yo en mis dieciocho repetí la lección sin aprenderla.
La cantera se fue secando
con tanta polvora mojada
y fui como un gil
dando vueltas eternas
en un caballo de madera.
Las veces que me tocó la sortija fue por error.
No me da el cuero para chorro
ni para político
ni para ganapán.
En el amor me fue mal
pero creo que en esa lid
lo mejor es perder:
Las puñaladas siempre vienen con las uñas pintadas
y aunque pasa el tiempo
no se cansan de darlas.
Para disculpar, si la vivo de trompo,
eso es de mi cosecha
de inocente seguro
les llevo algunos metros.
me olvido, vuelvo a lo mismo, me pongo tierno
y siempre al final resulta que de noche
todos los gatos son pardos.

3 comments:

Anonymous said...

Nice header!!
MVP

Gilgalad said...

such a beautiful tree.

Sancho said...

Muy lindo poema