Acá no van los slogans de calidad y servicio
Andresito se toma sola y como viene.
Nada de alimonada, menta fresca o de exportación,
nada de gusto a naranja o hierbas aromáticas
ni de palos, ni sin palos, ni pez palo, ni a palos
ni de casas de herreros ni de cuchillos.
En Capital no se consigue.
Tan solo aparece en las entrañas de Superdetodo
o en las estanterías de CLC
La vimos con Valentín y Sancho en Las Flores y nos cargamos ocho kilos
y en otra oportunidad Lea la asaltó en Salto.
Y en Dolores
porque Andresito es el dolor del gaucho
de la moza que agita el tibio pañuelo y luego se va achicando
Andresito no es de los Deli de Palermo Soho
No está a gusto en las superboutiques de Santa Fe
que le venden mate, bombilla y yerba a la rubia recién aterrizada de Wisconsin.
Nada de buscarla en el Norte.
Nada de cadenas francesas
ni de marketing directo o business to business.
Andresito crece en la selva. Ahí nomás de la triple frontera,
donde el Mossad, Hezbollah y la CIA intercambian guascazos
cebando unos amargos.
Thursday, February 14, 2008
Envasado en Origen
Publicado por Gilgalad en 6:24 AM
Etiquetas: Poemas del Placard
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
9 comments:
Sshhh, no hay que levantar la perdiz, Galad!
En cualquier momento la empiezan a exportar y nos quedamos con las manos vacías de este oro verde que nos ayuda a sobrellevar cada día del Señor, hasta que llega la hora de reemplazarlo por las nobles bebidas etílicas.
y decime una cosa Fiera, esa hora que vos decis, la de las nobles bebidas, cuando se termina?
No conozco ese cambio de horario.
Esa hora termina unicamente cuando te quedas dormido abrazando la botella. Despues te despertás y hay que remarla de nuevo con Andresito.
mierda, yo soy mas amigo de Juancito, o de algun ignoto pero noble clan de las tierras altas.
Esoso si que saben remarla.
el amigo Andresito me acompañó fielmente, apenas lo conocí, a fines del 2.004 en la selva misionera, cerca de Eldorado a la vera del Paranaguazú... eso sí, no me era efectivo contra los mosquitos así que, al agonizar la tarde, cuando esos turros venían al ataque, yo sorbía Añejo W para que ese sudor bien guapo que me daba, los espantara porque me estaban volviendo loco. Andresito, "señora" yerba...
Ke hacés Ricky,
Hay una poesía mía al Añejo W. No sé si la viste pero está creo que en un post de Enero.
Todo viento? En cualquier momento te hacemos pescador.
Saboreo cuatro delicias de esta noble pieza poética:
La Andresito en sí misma.
El insuperable Superdetodo de Las Flores.
Las Flores, cuyo recuerdo evoca el poema.
Y el apocalíptico final:
"Andresito crece en la selva. Ahí nomás de la triple frontera,
donde el Mossad, Hezbollah y la CIA intercambian guascazos
cebando unos amargos".
Todo muy bien amigo Gilgalad y cia. Aguardando mis vacaciones postergadas. Por supuesto que ya tenía visto la entrada del Añejo que confieso me hubo gustado. Lo que son las casualidades! Y anduvo nomás con los famélicos mosquitos misioneros. Un abrazo y nos vemos en otro comentario.
Todo muy bien amigo Gilgalad y cia. Aguardando mis vacaciones postergadas. Por supuesto que ya tenía visto la entrada del Añejo que confieso me hubo gustado. Lo que son las casualidades! Y anduvo nomás con los famélicos mosquitos misioneros. Un abrazo y nos vemos en otro comentario.
Post a Comment