Friday, March 28, 2008

El Fin de la Infancia

10 comments:

La Fiera said...

Era mi amigo......

Gilgalad said...

Yo lo quería...

El guardian de la maldita ota said...

una cosa es que se lleven a un amigo, otra muy distinta que te lo corten en pedacitos....

La Fiera said...

Hoy es un Ficus, mañana puede ser una torre gemela.

Sancho said...

ustedes cáguensé de risa, pero acabo de enfrentarme con la vecina que lo plantó y me vino a encarar. Me dijo: "si yo fuera hombre te partirúia la cara por lo que hiciste".

Gilgalad said...

Y... yo estoy del lado de la vecina. Los árboles no son para matarlos. Te van a ir a buscar los Ents por asesino de árboles.

Además ya te dije... primero vinieron por los árboles... y vos no dijiste nada porque no eras árbol.

El guardian de la maldita ota said...

tiene razon la javie, que pasa?
No te bancas que tu pequeño hijo tenga amigos, y que sean diferentes?
Es que la savia no es tan buena como la sangre?
Desalmado.

Sancho said...

De verdad, yo juro esto: no pretendía que lo sacaran de cuajo, sino apenas que lo podaran. De hecho, yo también le tenía simpatía. A mi me gustaba ese panorama verde en la ventana tanto como a Rai. Acá lo que hubo fue un gran malentendido; un error concatenado en la comunicación. Es como cuando alguien dice: "apriétenlo un poquito nomás, para que no se agrande" y los bestias del servicio van, lo liquidan, lo cortan en rebanadas y te lo dejan ahí tirado para que todo el barrio lo vea. Obvio: uno queda como un criminal; ahora pasé a ser como el Yabrán de Barracas. Una injusticia. Otra vez los medios de comunicación y los sicarios equivocando el trazo.

Gilgalad said...

Primero vinieron por los árboles y no dije nada porque yo no era árbol.

Luego vinieron por los campeones en la mala y no dije nada porque yo estaba en la buena (bah... protesté porque tuve que garpar el café)

Luego vinieron a pintar la terraza y no dije nada porque total me iba a fin de año.

Luego vinieron por el carnicero paraguayo que me agenciaba, pero yo no dije nada porque el paro del campo ya se había levantado.

Ahora vienen por mi Volvo, porque se rompió la caja, hay que importarla de Suecia, sale como un millón de dólares.

Y no hay nadie que diga nada.

Sancho said...

Gilga: En mi posteo, la respuesta.