Estos son chiches para impresionar a los compradores de tecnología y celulares último modelo. Burguesías, publicidad Nokia; una manera de hacerle creer a los aburridos gordos que siguen comprando Mackintosh que ellos también pueden “hacer música”. ¿A qué tanta frialdad, tanta falta de onda, tanta sobriedad? ¿A qué tanta santidad y pureza gélida? Esto es inhumano. Falso arte impecable, puritano y tedioso para niños malcriados que se aburrieron del shopping. Cómprense la consola de videojuegos que sale 9000 dólares si quieren, pero dejen tranquila a la música. Snobismo total. Snobismo y vacío. Eso pienso de estos aparatitos. Me gusta la gente que se equivoca, aquella a la cual le fallan las máquinas y botones y tiene la piel rugosa, la guitarra gastada, el aliento cruzado. El arte es preguntas, dudas, incertidumbre, miedo, visceralidad. Esto es deprimente. Una demostración más de la decadencia capitalista: que alguien que apreta el switch de “on” diga: “Estoy tocando; soy un músico; soy un artista”. ¿Es un artista el que se compra un plasma tamaño baño y lo enchufa? Patético. Y lamento profundamente que lo use Bjork, que tiene tan linda voz.
5 comments:
Si lo viera Pappo (qepd)....
decia, que ahora para ser musico hay que estudiar en el Otto Krausse
Estos son chiches para impresionar a los compradores de tecnología y celulares último modelo. Burguesías, publicidad Nokia; una manera de hacerle creer a los aburridos gordos que siguen comprando Mackintosh que ellos también pueden “hacer música”. ¿A qué tanta frialdad, tanta falta de onda, tanta sobriedad? ¿A qué tanta santidad y pureza gélida? Esto es inhumano. Falso arte impecable, puritano y tedioso para niños malcriados que se aburrieron del shopping. Cómprense la consola de videojuegos que sale 9000 dólares si quieren, pero dejen tranquila a la música. Snobismo total. Snobismo y vacío. Eso pienso de estos aparatitos. Me gusta la gente que se equivoca, aquella a la cual le fallan las máquinas y botones y tiene la piel rugosa, la guitarra gastada, el aliento cruzado. El arte es preguntas, dudas, incertidumbre, miedo, visceralidad.
Esto es deprimente. Una demostración más de la decadencia capitalista: que alguien que apreta el switch de “on” diga: “Estoy tocando; soy un músico; soy un artista”. ¿Es un artista el que se compra un plasma tamaño baño y lo enchufa? Patético.
Y lamento profundamente que lo use Bjork, que tiene tan linda voz.
No se puede agragar nada más después de semejante alegato a favor del sagrado Rock & Roll.
En algún lugar, con los vasos llenos y las botellas vacías, Hendrix y Pappo estarán brindando por estas conmovedoras palabras.
Larga vida al Rock & Roll.
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